La influencer iCata tuvo su debut la noche de este jueves en Gran Hermano, donde llamó la atención su particular saludo a los hombres de la casa estudio.
La joven de 29 años fue recibida por los participantes del reality show pasada la medianoche, convirtiéndose en la última jugadora nueva en sumarse, a la espera de lo que ocurrirá en los próximos días con el repechaje.
Una vez al interior de la casa, la conocida cosplayer conoció de inmediato a Bigote, quien no la dejó tranquila en ningún momento, para luego saludar a Coni y Scarlette con un abrazo y un beso, al igual que con Pincoya.
Sin embargo, algo que se destacó al ingresar a Gran Hermano fue la manera en que iCata se dirigió a los hombres con un saludo de manos, a diferencia de lo que ocurrió con las mujeres, algo que no pasó desapercibido por los seguidores en redes sociales.
¿iCata será “Lulo”?
A la hora de elegir su dormitorio en Gran Hermano, iCata se inclinó por el dormitorio de los “Lulos”, encabezado por Pincoya. De hecho, fue ella quien la invitó a sumarse, eligiendo la cama que anteriormente fue ocupada por Sebastián Ramírez.
De esta forma, se sumará a Coni, Ignacia, Scarlette y Raimundo en la misma habitación.
Los despidos informados por Clínica Las Condes también incluyeron a la plana ejecutiva, ya que pasó de 13 a 8 integrantes, con sueldos ajustados a mercado, y una reducción en las dietas de los miembros del directorio.
Las tensiones internas en Renovación Nacional se han intensificado ante la opción de que el senador Francisco Chahuán se haga parte de las primarias presidenciales, mientras el presidente del partido, Rodrigo Galilea, enfrenta críticas por su postura de no admitir a Rodolfo Carter y su “apoyo anticipado” a Evelyn Matthei.
En su declaración, los tres testigos apuntaron que el vehículo policial se lanzó contra un grupo de personas que estaban en las afueras del Monumental, sin detenerse o evitar un eventual atropello.
El Partido Socialista abrió un inédito flanco interno al no respetar la voluntad de Isabel Allende para que el diputado por Valparaíso ocupe su cupo en la Cámara Alta.
Es preocupante la creciente propensión de un pequeño grupo a tergiversar, difamar o, incluso, menoscabar a todos aquellos que planteen una mirada distinta de la suya -ya sean movimientos sociales u organizaciones de la sociedad civil-, tanto desde la instalación de retóricas desinformadas o de la criminalización de sus actividades, valiéndose para ello del uso de lógicas de poder absolutamente asimétricas.